El 23 de marzo de 1976 es una fecha importante para la historia del rock, en especial del heavy metal, luego de que la banda británica JUDAS PRIEST lanzara oficialmente el sucesor de su disco debut bautizado: Sad Wings of Destiny.
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El disco, que contó con la participación de Rob Halford (voz), K.K. Downing (guitarra eléctrica), Glenn Tipton (guitarra, piano, coros), Ian Hill (bajo) y Alan Moore (batería), ha sido considerado por muchos, como una de las piezas clave del heavy, lo que ubica al álbum como uno de los más influyentes del género.
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Un año en que paralelamente bandas como RAINBOW presentaban su majestuoso Rising, con su sonido heavy metal neoclásico, SCORPIONS lanzaban el Virgin Killer, AC/DC con Hight Voltage, y entre otras obras clásicas, nacía la agrupación SAXON.
Los derechos musicales del álbum
Irónicamente, Sad Wings Of Destiny tiene un bárbaro significado dentro de la historia de la música y por supuesto de JUDAS PRIEST, pese a que la banda no tiene los derechos sobre las canciones, ni recibe regalías de este, ni de Rocka Rolla, su primer disco. Esto luego de que JUDAS, después de su publicación firmara contrato con la discográfica CBS Records, cancelando su entonces acuerdo con Gull Records, quienes finalmente se quedaron con los derechos.
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En 1984, Gull quebró y vendió los derechos de los discos a varios sellos discográficos, quienes los han remasterizado en distintos formatos de grabación.
Algo, por donde se le mire injusto, ya que de hecho los mismos miembros de la banda tuvieron que conseguir trabajos alternos para costear la grabación, ya que la discográfica solo puso una parte. De hecho Halford no descarta la posibilidad de recuperar los derechos de los dos primeros álbumes de JUDAS PRIEST, quien a comienzos de 2021 declaró en That Jamieson Show:
“Hemos ido de un lado a otro con los propietarios de estos derechos. Y es una lástima. Espero que algún día podamos traerlos de vuelta al redil de Priest, porque son valiosos. Son como tesoros, en realidad. Y creo que probablemente las personas que todavía los poseen lo entienden, porque continúa repitiéndolo todavía”.
Grabación y promoción del disco
Las canciones incluidas en el álbum no eran del todo nuevas para el momento de la grabación, ya que muchas de ellas se habían tocado en la gira de promoción de Rocka Rolla en 1975. De hecho, algunas estaban contempladas para el álbum debut, pero Rodger Bain, su productor, no las incluyó finalmente.
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En tan solo dos semanas, entre noviembre y diciembre de 1975, los estudios Rockfield de Gales, fueron epicentro de esta obra maestra. Y finalmente se lanzó en Reino Unido el 23 de marzo de 1976, siguiendo Estados Unidos.
El disco en sí, no tuvo mucho éxito comercial en su salida, esto debido a que en estos años bandas como SEX PISTOLS, RAMONES, THE CLASH, entre otras, estaban pisando fuerte con la llamada “primera ola del punk“.
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La gira promoción de Sad Wings Of Destiny empezó el 6 de abril de 1976 y culminó el 27 de mayo, dando dos conciertos adicionales el 20 y 25 de junio en Londres y Finlandia, respectivamente. Un total de 22 conciertos con pocas ventas, que haría parecer que era un disco que podía pasar como desapercibido, pero que dicho por alguna prensa especializada en la época “era el disco que reinventó el heavy metal”, o “uno de los pocos álbumes que ayudaron a definir literalmente al Metal como género”. Algo que a la fecha se ratifica.
Artwork y Canciones
La portada contiene una obra llamada Fallen Angel, que significa un ángel atormentado y castigado por llamas, con una cruz de tres puntas como collar. Un preludio visual de sensaciones que transmiten las oscuras, seductoras y malévolas letras de las canciones del álbum. El arte, con el tiempo se convertiría en un símbolo de JUDAS PRIEST. “La Cruz de Judas Priest”.
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Con respecto a los tracks, Glenn Tipton fue el principal compositor. Las canciones Island Of Domination, Deceiver y Genocide, fueron en compañía de Halford y K.K. Downing. Durante el proceso, se grabó una versión de “Diamons & Rust“, original de Joan Báez, que luego se excluyó del listado a las pocas semanas del lanzamiento.
Otras canciones incluidas son Victim Of Changes con una duración de casi 8 minutos, es una track que la banda comenta fue inspirado en Black Dog de LED ZEPPELIN, y es una mezcla entre las canciones Whiskey Woman y Red Light Lady. The Ripper, en cambio es corta, pero sublime y hace referencia a Jack el destripador.
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La balada Dreamer Deceiver es más melódica y enlaza con Deceiver, canciones que en vivo eran interpretadas como una sola. Las teatrales Prelude y Epitaph, en donde predomina el piano. Tyrant, por su parte llega con un ritmo más ligero. Genocide, que según Halford es “un tema controversial , provocador y estimulador, con letras fuertes y gráficas”, y una de las primeras canciones de thrash metal. Y la canción que cierra, Island Domination, donde el vaivén de riffs engalanan, cerrando con broche de oro esta maravillosa pieza.
Escucha el álbum completo:
Un disco imprescindible para entender el origen y la evolución del heavy metal.
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